Distinguidos campistas, chuloputas de mierda, zowis attws e instagramers ridículos en general. Cuando uno va de vacaciones, fuera de su espacio/entorno habitual, es común sentirse atraído por las pequeñas diferencias, por lo que no nos es común en nuestra vida rutinaria. Así lo decía Jules en Pulp fiction y así lo pensaba yo el otro día mientras observaba un estante lleno de refrescos con sabores, digamos, exóticos. Los productos exclusivos nos atraen, por probar algo distinto, y me he dado cuenta de lo muy importante, e incluso me atrevería a decir que 'mágico', resulta encontrarse con nuestra colección por pura casualidad. Ya lo decía Milan Kundera que para que un amor sea inolvidable las casualidades deben volar hacia él, jajaja. Parecerá una gilipollez, pero ahora os explico un poco mejor y os desarrollo un poco más a santo de qué viene toda esta pantomima.
Durante el mes de agosto, además de leer Las campanas no doblan por nadie de Bukowski, que es demigrante como el libro de @elvemon pero sin las risas, he estado leyendo el blog de Anes Ortigosa, un espeleólogo de la creatividad, en busca como todos de un nuevo atajo que nos acerque más a nuestro objetivo de forrarnos (jajaja). Lo que saco en claro después de haber peinado prácticamente todas las entradas de su blog es que la fórmula del éxito no está redactada todavía en internet; de lo contrario todo el mundo podría echar mano de ella ¿verdad? Eso sí, lo que saco en claro es que los consejos que te da la web siempre se quedan cortos. Vamos a ver ¿Conocéis el ejemplo de alguien que haya conseguido formular la clave del éxito con su propia alquimia? Yo sí:
Los que hayáis leído "Heavier than heaven" sabréis de sobra que Kurt Cobain tuvo como único propósito en la vida lograr el siguiente objetivo: convertirse en el número uno de la música de los '90 con su banda Nirvana. Lo sencillo es creerse esa mierda de que la MTV les propulsó la carrera, pero nada más lejos de la realidad. Nirvana crearon un sonido, un grupo y una puesta en escena que molaba tanto que consiguieron convertirse en lo que los corbateros mercachifles llaman UNA OPORTUNIDAD DE NEGOCIO, de ahí que recabasen el apoyo de la industria musical del momento. ¿Qué fue antes, el huevo o la gallina? Ya sabéis: Fue primero la gallina, o una proto-gallina, la que engendró los huevos de oro. Así pues, ellos ya se habían hecho con la piedra filosofal y fueron los productores y discográficas los que vinieron a sacar tajada del filón. Kurt Cobain se pasó la música. Es por ello por lo que ya de últimas declaraba que la música le aburría y había perdido todo el interés para él. Cuando llegó a la cima se dio cuenta de que allí arriba no había nada, ni le esperaba nadie, ni le quedaba nada por hacer... más que contemplar el paisaje bajo sus pies. Alone in the crowd que decía Johnny Thunders.
Está claro que la fama y las tendencias musicales duran lo que duran; después de molarlo todo pasas a dar todo el asco. Ahora se tiende a menospreciar las tendencias del ayer aludiendo que estaban "sobrevaloradas", jajaja. Hijos de puta.
Precisamente hablando de modas y tendencias musicales: El otro día en la feria ponían la tan manida canción de la Tribu comanche mientras esperábamos a subir a las colchonetas que estaban junto a los toritos. No sabía de quién era la canción, y mira que la he escuchado veces. Buscando en Google descubrí que el tema es de Zapato veloz, sí, los autores del Tractor amarillo. Me interesé por la carrera de estos (casualmente estaban de moda el mismo año que Nirvana, jaja) y resulta que todavía hacen canciones, con una nueva formación, y han tenido temas que han estado nuevamente en boca de la gente como por ejemplo el Bela ciao ese que se puso de moda cuando hacían La casa de papel. La verdad, hay que ver qué ingrata es la música. O qué ingrato es tratar de ganarse la vida o tratar de sacar rédito con la expresión artística. Juan Abarca lo decía con cínico pitorreo: los artistas somos escoria.
¿Qué sacamos pues en claro con toda esta amalgama de conclusiones, en principio, sin nexo o sentido aparente?
Como ya me considero médico brujo comienzo a aplicar mi alquimia para todos ustedes:
La exclusividad de nuestra propuesta editorial clandestina, finalmente, no persigue el lucro... sino que nos hemos propuesto molarlo todo. Nos vamos a pasar los libros. Si estuviésemos a la venta en cualquier librería común, espacios de mierda como Amazon, Fnac, Casa del libro etc seríamos exactamente igual que todos los demás :) Combino así lo que decían Jim Morrisson y el abuelo de Timothy Leary (anteriormente en este blog) con nuestra nueva máxima para crear un mantra. Tal vez sea esta, finalmente, la clave para el éxito que tanto andábamos buscando:
Perseguir nuestra propia fantasía; no hacer nunca lo mismo que los demás; mantenernos exclusivos, al margen del orden editorial establecido.
PD: Este verano me he descubierto MUY enganchado al móvil :( Una vez más volveré a alejarme de tan siniestros artefactos para sumergirme en nuestro próximo título. Lo tenía a la mitad... y además esta vez voy a permitirme un capricho que, si me sale bien y tal, le hará ganar muchos enteros con respecto a las publicaciones anteriores :)
Os tengo informados. Ánimo con el septiembre ;)
-R-
