Decir que ¡NI PUTA NI SANTA! LAS MEMORIAS DE LA VENENO es el mejor libro que he leído en lo que llevamos de año pues, claro, es decir poco y mucho puesto que justo acaba de comenzar febrero y además venía de leer el mierdazo titánico "Cómo ser Bill Murray" de Blackie books del que insisto, hacedme caso, huid como de la peor enfermedad venérea que exista en el mundo.
Pues sí, lo cierto es que me lo leí en sólo dos noches y, como mínimo, ameno no os voy a negar que lo es. Tiene un estilo muy de Revista Lecturas, en plan capítulos cortos y párrafos con lo esencial... pero vamos, que pese a que la edición es muy chula, con sus fotos en tetas de Cristina la Veneno a cada momento, el primer dato negativo que os puedo adelantar es que no vale los 20 euros que están cobrando por el. Es más, si lo pides por la web te cargan 5 pavos de gastos de envío... con lo cual te gastas 25 eurazos del ala en un libro que, a mi entender y pese a que reconozco que es ameno, no los vale.
Eso sí, la repentina muerte de Cristina la Veneno le ha dado un buen empujón a las ventas libro, del cual llevan ya cuatro o cinco ediciones en pocos meses, y el hecho de que se haya ido agotando ha conseguido a su vez que se incremente la demanda. Como el fallecimiento de Cristina se produjo meses después de la aparición del libro, para ser justos, no es plan el tachar de oportunista a su escritora Valeria Vegas ni mucho menos. Como os decía, el libro está bien, la edición está muy cuidada, no es una gran maravilla en cuanto a anécdotas pues estoy seguro que muchas de las buenas se han quedado en el tintero por tratar de sacar una obra que ensalzase las cualidades más humanas del personaje en cuestión... y sí, finalmente reconozco que me he quedado bastante tibio. Esperaba más profundidad y, sobre todo, esperaba que estuviese a la altura del precio que tiene.
No os voy a desentrañar el contenido, ya sabéis, comienza contando la historia de Joselito, al que en su pueblo le llamaban el Maricón, y a grandes trazos nos sumerge en su transformación para convertirse en Cristina, nos cuenta cómo se hizo prostituta, cómo le llegó el éxito y cómo le llegó el declive. Todo muy por encima, ya os digo, en plan revista de peluquería.
De todos modos, para ser justos y parafraseando la faja que llevaba el libro de Bill Murray, este sí podría considerarse como EL LIBRO DEFINITIVO SOBRE UNO DE LOS PERSONAJES MÁS CONTROVERTIDOS, DESENFADADOS Y ENIGMÁTICOS DE LA HISTORIA DE ESPAÑA. Vamos, que ahora no porque el rollo transexual y todo eso está como muy extendido, pero en los noventa, salvando la excepción de Bibiana Fernández, Cristina la Veneno era en sí un enigma, puro tabú. La gente de entonces no entendíamos en qué consistía eso de ser transexual y ni mucho menos qué tipo de vida llevaban los travestis. Si tenían tiburón o si tenían hachazo. Si una cosa buena se le puede alabar al libro es que, aunque tarde, refleja perfectamente lo que significaba ser transexual en los noventa... y que le quiten lo bailao, porque muchos que iban de machos le pagaron los vestidos que llevaba.
Hala, el que haya llegado hasta aquí buscando una crítica ya sabe: Sólo se lo recomiendo a gente que esté dispuesta a gastarse los 25 euros que piden por tener mucha simpatía, o curiosidad, hacia el personaje. Por lo demás, está bien. Palabra.
-R-
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