Bienamados maricones y negros de mierda, dichosos los ojos y todo eso. Tras pegarme un mes entero de vacaciones, que hacía como 15 años que no tenía unas vacaciones tan cojonudas, vuelvo al ruedo para pasaros parte de las últimas noticias que tengo con respecto al proyecto Condiloma ediciones. Durante todo el mes de agosto no he hecho nada de nada, sólo comer y dormir; he abandonado la música, los libros y cualquier tipo de estímulo de carácter tecnológico, lo cual se ha traducido involuntariamente en un prolífico hervidero de ideas; se me ocurrió una idea para un thriller de humor negro que abordaría la situación política actual del país... pero ahora pienso que no tengo ninguna necesidad de escribir un libro que trate de cambiar el rumbo de los acontecimientos. También se me ocurrió escribir una novela de esas pseudo-eróticas que tanto se estilan ahora mismo, pero con el típico componente escatológico marca de la casa, jajaja. Total, que sí, que todo eso está muy bien pero vamos, que ya hay mucha gente que escribe thrillers, novelas eróticas y mierdas por el estilo, con lo que finalmente decidí dejarme de tonterías y continuar con nuestras gamberradas, que a mí por lo menos es lo que más me gusta. Ya hubo suficiente hiato con "La mierdamorfösis", así que si tengo que seguir publicando algo mejor será que vuelva a nuestra fórmula original, que al fin y al cabo es lo que a mí me mola y lo que seguro esperan los incondicionales de la colección.
La semana pasada volví con la siguiente entrega de Maricones del espacio. Ni que decir tiene que apenas me falta escribir la conclusión de la misma y ya tendremos lista nuestra próxima publicación. Durante las vacaciones se me ocurrieron muchas cosas que quería incluir; se me ocurrió también cómo abordar la portada y la contra; se me ocurrieron también varios detalles de mi vida personal que quería conservar encriptándolos entre las líneas de este nuevo libro. En definitivas cuentas, lo próximo que verá la luz será el nuevo título de la colección más bastarda del momento.
MUERTE EN FACEBOOK
Tal como os decía, una de las cosas que no he echado para nada de menos este verano han sido las redes sociales. Al volver me encontré con 46 avisos pendientes de Facebook, que me han servido para darme cuenta de que Facebook es una imbecilidad, que a mí particularmente no me sirve más que para hacerme perder el tiempo y que por culpa de Facebook no escribo más. Así pues, resuelvo pasar del Facebook. Que le den por el culo al "Sukenberg" ese o como coño se llame, jajaja. Los que queráis seguir informados de nuestras chorradas no os preocupéis, mi socio el Landser, que reconoce abiertamente que tiene dependencia al Twitter, será quien vaya poniéndoos al día mientras cuelga sus chorradas sobre robots y sobre películas que el 96% de la población desconoce por completo.
Ah, y otra cosa, hemos resuelto con el Landser publicar otro de los dos números que quedaron colgados. Todavía no sabemos si publicaremos los dos que faltan del tirón, o si sacaremos uno este año y otro el año siguiente. Ya se verá, según como andemos de pasta.
Pues nada, eso es todo. Una dosis de humildad y una temporada practicando el bello arte de la paciencia han servido para darle un respiro a los agobios que tenía previo a que llegara el verano. Si es que cuanto más avanzas, tanto más quieres correr... y no sirve de nada agobiarse. Ya tenemos un libro en el mercado; contamos con un punto de venta fijo en Barcelona y una pequeña editorial que nos respalda; hay gente por toda España conociendo el Maricones, así que nada... A los queréis Maricones: tendréis más Maricones.
Oi!
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