Pues sí, es domingo por la noche, mañana tengo fiesta y en vez de estar por ahí bebiendo, follando o cenando en un macauto estoy aquí en mi keo escribiendo la autocrítica de rigor sobre nuestra última publicación, un libro tan corto que de haber sido un disco podría considerarse un EP, pero vamos, que esa era la idea que llevaba cuando lo escribí. Justo después de corregirlo se lo mandé al Álex y apenas debió llevarle un par de horas leerlo. La opinión que me dio al respecto es que engancha, y bueno, eso mismo estaba pensando yo cuando trataba de explicar qué es lo mejor de LA MIERDAMORFÖSIS. Siguiendo con este patrón, y para ser breve, procedo a resumir mis impresiones tras leerlo.
Ah, eso sí, mi valoración es la siguiente: Está muy bien.
En efecto, para mi gusto nuestro último trabajo está muy bien. Y no porque me parezca un libro imprescindible ni nada de eso sino porque, a diferencia del resto de libros de nuestra colección, esta vez puedo decir que he aprendido mucho escribiéndolo. He aprendido, sobre todo, qué es lo que me gusta y qué es lo que no me gusta encontrar cuando leo un libro. Podría decirse de La Mierdamorfösis que es como un 'libro piloto'. Es probable que todo lo que aprendí escribiendo esta novela lo aplique a las que vengan después. Me explico:
La Mierdamorfösis tiene un estilo narrativo muy depurado. Hago uso del mismo lenguaje que empleo en Maricones del espacio porque me he dado cuenta que no soporto la pedantería ni el uso de palabras que están fuera de mi vocabulario habitual. Usar palabras que no utilizas habitualmente confunde al lector y además distorsiona la lectura. No tiene ningún sentido utilizar un lenguaje que no es el tuyo.
Por otra parte procuré no andarme demasiado por las ramas y controlar bien los tiempos, porque en todo libro los hay, lo cual consigue que la lectura sea fluida y tengas ganas de terminarlo rápido ya que va hilvanando los acontecimientos a un ritmo que está muy bien conseguido. Sí, supongo que eso es lo mejor que se puede decir sobre La Mierdamorfösis, aunque quien esperase leer una nueva entrega del Maricones se habrá llevado una decepción. Desde el principio he tratado de dejar claro que se trataba de una obra paralela y no de un nuevo número de la colección.
Continuando con los aciertos del libro, creo que lo bueno que tiene también es que invita a pensar. Que dice mucho en muy poco texto. Vengo de chuparme 600 páginas completamente anodinas del Skagboys de los cojones y debo decir que a día de hoy no hay nada que me de más asco que estar leyendo por leer, sin que me estén contando nada nuevo. La verdad, es como estar aguantando la chapa de alguien que te cuenta su puñetera vida mientras que a ti te suda el nabo. El sr. Irvine Welsh podría haber escrito un libro de 50 páginas y me habría hecho un favor. No soporto los libros donde ves que todo es paja en plan: "Llevo más de 70 páginas y no sé qué coño estoy leyendo". Ah, y hablando de Coños, una cosa que también he aprendido sobre el libro de Diana Aller: Aparte de que no soporto leer cosas carentes de contenido, tampoco soporto los libros donde NO sucede nada.
Así pues, y para seguir siendo escueto, ahora os hablaré de lo que no me gusta de La Mierdamorfösis: Después de releerlo pude comprobar que no es un libro tan trágico como pensaba que sería, pero claro, en comparación con el Maricones este libro es una esquela. He llegado nuevamente a la conclusión de que no hay libros como el Maricones, quiero decir, con ese tipo de humor negro, desenfadados, cargados de mala hostia y de momentos delirantes. La Mierdamorfösis se parece demasiado a los libros que escribe todo el mundo, y eso es un grave error. El gran acierto que tuvo Cervantes fue desmarcarse de toda la mierda que se escribía en su época; mientras que el resto de escritores trataba de narrar la vida del más valeroso de los guerreros con la prosa más refinada, Cervantes se pasó por el forro todas las normas establecidas y creó su propio estilo.
Ah, eso sí, mi valoración es la siguiente: Está muy bien.
En efecto, para mi gusto nuestro último trabajo está muy bien. Y no porque me parezca un libro imprescindible ni nada de eso sino porque, a diferencia del resto de libros de nuestra colección, esta vez puedo decir que he aprendido mucho escribiéndolo. He aprendido, sobre todo, qué es lo que me gusta y qué es lo que no me gusta encontrar cuando leo un libro. Podría decirse de La Mierdamorfösis que es como un 'libro piloto'. Es probable que todo lo que aprendí escribiendo esta novela lo aplique a las que vengan después. Me explico:
La Mierdamorfösis tiene un estilo narrativo muy depurado. Hago uso del mismo lenguaje que empleo en Maricones del espacio porque me he dado cuenta que no soporto la pedantería ni el uso de palabras que están fuera de mi vocabulario habitual. Usar palabras que no utilizas habitualmente confunde al lector y además distorsiona la lectura. No tiene ningún sentido utilizar un lenguaje que no es el tuyo.
Por otra parte procuré no andarme demasiado por las ramas y controlar bien los tiempos, porque en todo libro los hay, lo cual consigue que la lectura sea fluida y tengas ganas de terminarlo rápido ya que va hilvanando los acontecimientos a un ritmo que está muy bien conseguido. Sí, supongo que eso es lo mejor que se puede decir sobre La Mierdamorfösis, aunque quien esperase leer una nueva entrega del Maricones se habrá llevado una decepción. Desde el principio he tratado de dejar claro que se trataba de una obra paralela y no de un nuevo número de la colección.
Continuando con los aciertos del libro, creo que lo bueno que tiene también es que invita a pensar. Que dice mucho en muy poco texto. Vengo de chuparme 600 páginas completamente anodinas del Skagboys de los cojones y debo decir que a día de hoy no hay nada que me de más asco que estar leyendo por leer, sin que me estén contando nada nuevo. La verdad, es como estar aguantando la chapa de alguien que te cuenta su puñetera vida mientras que a ti te suda el nabo. El sr. Irvine Welsh podría haber escrito un libro de 50 páginas y me habría hecho un favor. No soporto los libros donde ves que todo es paja en plan: "Llevo más de 70 páginas y no sé qué coño estoy leyendo". Ah, y hablando de Coños, una cosa que también he aprendido sobre el libro de Diana Aller: Aparte de que no soporto leer cosas carentes de contenido, tampoco soporto los libros donde NO sucede nada.
Así pues, y para seguir siendo escueto, ahora os hablaré de lo que no me gusta de La Mierdamorfösis: Después de releerlo pude comprobar que no es un libro tan trágico como pensaba que sería, pero claro, en comparación con el Maricones este libro es una esquela. He llegado nuevamente a la conclusión de que no hay libros como el Maricones, quiero decir, con ese tipo de humor negro, desenfadados, cargados de mala hostia y de momentos delirantes. La Mierdamorfösis se parece demasiado a los libros que escribe todo el mundo, y eso es un grave error. El gran acierto que tuvo Cervantes fue desmarcarse de toda la mierda que se escribía en su época; mientras que el resto de escritores trataba de narrar la vida del más valeroso de los guerreros con la prosa más refinada, Cervantes se pasó por el forro todas las normas establecidas y creó su propio estilo.
Como siempre hago una comparativa entre un disco y el libro en cuestión, tengo claro que esta vez me decanto por comparar La Mierdamorfösis con el RAPED ASS. Sí, al igual que el EP de los Anti cimex, nuestro libro es muy corto, condensa perfectamente lo que quiere decir en un espacio de tiempo muy escueto, es intenso, de gran calidad, diferente y sobre todo muy crudo. La cita de Kafka que abre el libro ya lo dice bien claro: Deberíamos leer sólo los libros que nos golpeen como una desgracia dolorosa. Así pues, La Mierdamorfösis es mi tributo a los discos D-Beat. De hecho, si estuviera orquestado, podría considerarse crust.
Ya por último, tan sólo me queda decir que con este nuevo artículo da por concluida la vida útil de La Mierdamorfösis. Durante esta semana he estado mandando el libro en PDF y el archivo con la edición para imprimir a todas las páginas web que publican fanzines de forma gratuita. Puede que haya alguna que acepte publicarlo, aunque lo más probable es que la mayor parte de los correos que he mandado estos días no hayan servido para nada.
Otra cosa que he aprendido es que existen muchas webs que promueven los fanzines, pero la mayoría son páginas que han muerto ya, que han sido abandonadas o que están cargadas de basura. No hay futuro ahí, con lo cual volveremos a la fórmula que hemos estado utilizando hasta ahora.
Espero que las conclusiones a las que he llegado con este nuevo proyecto os sirvan a vosotros también. Decía Manolo García que 'Nunca el tiempo es perdido'... Me gustaría hablar con él para contarle qué es lo que estoy haciendo en semana santa, jaja. Puede que cambiase de opinión.
Lo dicho, más suerte la próxima vez, y gracias a LA MIERDAMORFÖSIS, que me ha dado tanto.
-R-
Ya por último, tan sólo me queda decir que con este nuevo artículo da por concluida la vida útil de La Mierdamorfösis. Durante esta semana he estado mandando el libro en PDF y el archivo con la edición para imprimir a todas las páginas web que publican fanzines de forma gratuita. Puede que haya alguna que acepte publicarlo, aunque lo más probable es que la mayor parte de los correos que he mandado estos días no hayan servido para nada.
Otra cosa que he aprendido es que existen muchas webs que promueven los fanzines, pero la mayoría son páginas que han muerto ya, que han sido abandonadas o que están cargadas de basura. No hay futuro ahí, con lo cual volveremos a la fórmula que hemos estado utilizando hasta ahora.
Espero que las conclusiones a las que he llegado con este nuevo proyecto os sirvan a vosotros también. Decía Manolo García que 'Nunca el tiempo es perdido'... Me gustaría hablar con él para contarle qué es lo que estoy haciendo en semana santa, jaja. Puede que cambiase de opinión.
Lo dicho, más suerte la próxima vez, y gracias a LA MIERDAMORFÖSIS, que me ha dado tanto.
-R-