¿Dónde está el hombre que tenga un plan? ...nos preguntamos todos cuando tratamos de dar visibilidad a nuestro proyecto. Es por eso por lo que la gente que trabaja en publicidad se ganan tan bien la vida: Existe un importante nicho de negocio que antes comprendía prensa, vallas publicitarias y televisión; ahora con internet las normas han cambiado y es ahí donde se invierten cantidades ingentes de dinero destinado a publicitar cualquier tipo de producto.
Atención: "Este no es un post sobre el Maricones del espacio, sino sobre el negocio editorial"
Desde que sacamos el primer Maricones del espacio no hemos hecho más que buscar la fórmula para dar a conocer nuestra colección y generar el mayor número de ventas (sí, estoy hablando como si fuera un puto empresario de los cojones). Total, que durante estos cuatro últimos años hemos hecho de todo en pos de promocionarnos: hemos regalado libros en digital y en físico; hemos hecho promoción con fláyers; hemos hecho alguna promoción en la radio; hemos organizado un concurso; las redes están saturadas de información sobre nuestras publicaciones y al final... ¿Qué hemos conseguido?
Dejad que os explique, por partes, qué es lo que hemos ido haciendo con cada libro que hemos sacado:
1.- Cuando publicamos el primer libro en PDF lo pusimos en descarga directa y gratuita en webs de autopublicación como Bubok o Lulú. También creamos nuestra propia web desde donde podía descargarse el libro de forma gratuita. De aquellas ya nos imaginábamos que en un principio sería necesario "regalar el pan para luego poder vender el embutido" y así lo hicimos. Comenzamos de una forma muy altruista.
2.- Después, cuando sacamos el "Chaparrón de pollas", lo subimos a otras webs donde también podían descargarse libros gratis en PDF como Libros-más-vendidos, Free-ebooks o Entrescritores. Se suponía que ahí tendrían mucha visibilidad, pero vamos, que las webs de descargas de libros tampoco son las que más tráfico tienen. Poca gente hay que lea; poca gente hay que lea en PDF.
3.- Luego, con el "Nos importa tres cojones", subimos la portada a foros punkis y a páginas donde recomendasen libros de humor negro. También nos dio por sacar pegatinas, hacer chapas e imprimir fláyers para repartirlos por ahí. La publicidad de ese tipo, la verdad, apenas es efectiva si no es que te dedicas a ofrecer comida a domicilio.
4.- Lo mismo hicimos con "Tu vida da un asco que te cagas", que si no recuerdo mal llegamos incluso a subirlo a Taringa. De aquellas les pedimos a los de La Tostadora que nos hicieran camisetas promocionales del "Cojones" y, bueno, alguna repartimos... pero vamos, que si los libros tenían poca fama, menos fama iban a tener las camisetas.
5.- Estábamos acabando el "Putas, yonquis e inmigrantes" cuando sacamos la primera edición impresa del Maricones volumen 0, entonces nos dedicamos a entregar varias copias por algunas librerías de cada una de las comunidades autónomas de España para ver si así lo poníamos en circulación... pero nada, lo único que conseguimos fue regalar pasta porque las librerías pasaron bastante de nosotros.
6.- Luego llegó el festival de autoedición en Madrid, el Hul!, y conocimos a Lucía de Libros de Autoengaño. Imprimimos los dos primeros libros y se los mandamos para que los vendiera en todas las ferias en las que participase. Como más o menos la peña los iba comprando, y nosotros tampoco no éramos unos ansiosos de la pasta, Lucía ha ido vendiendo nuestros libros desde entonces en su plataforma de venta online.
7.- El "Sieg Heil" fue sacarlo en PDF y al poco ya lo estábamos imprimiendo en plan fanzine para repartirlo entre los colegas. Lo anunciamos en forocoches y a lo mejor se lo bajó mucha gente en PDF... pero nunca supimos cuánta gente lo descargó porque no teníamos posibilidad de contabilizar las descargas. Por aquel entonces a mi socio le invitaron a participar en un concurso de la radio y tuvo oportunidad de hablar del libro. Casualmente hacía unos cuantos meses que se vendía en Freaks (Bcn) y hubo algún curioso que se acercó a comprarlo.
7.- A la vez que nuestros libros comenzaban a venderse en la librería Freaks también estuvimos trabajando en el nuevo tomo recopilatorio "Maricones manía". Nuestra idea fue hacer un concurso, el Frikipops, con un premio grande para quien acertase todos los nombres de los frikis que aparecían en la hoja de excel (una Snes mini) o un premio de consolación para los 100 primeros que nos escribieran y que consistiría en recibir un ejemplar del Maricones manía. El concurso lo subimos a Forocoches y desde luego que no funcionó como esperábamos. Nuestra idea era repartir muchos libros gratis, para hacer promo de la editorial, y finalmente sólo repartimos cuatro.
8.- Por último, y tras el chasco del Frikipops, con La Mierdamorfösis comenzamos regalando el libro por los blogs de fanzines... pero finalmente optamos por hacerlo participar en un concurso literario de Amazon. A su vez, Maricones manía entraba a formar parte del olimpo literario, pues fue el primero de nuestros libros en tener ISBN y en aparecer en los principales establecimientos de venta de libros (Fnac, Casa del libro, Corte Inglés) ni que fuese teniendo solo presencia online. Quiero decir, que dichos comercios no tienen nuestro libro físicamente; sólo lo tienen puesto a la venta en sus respectivas webs.
En definitiva: Yo por mi parte he descubierto que no existe una fórmula mágica para recabar muchísimos lectores; de hecho, lo que he aprendido es que no hace falta invertir en publicidad porque a la amplia mayoría de la gente le suda la polla que hayas sacado un libro.
Eso sí, también es cierto que todo suma y que con cada nueva iniciativa que hemos puesto en marcha siempre hemos conseguido llegar a alguien. Cada lector es muy valioso, aunque muy pocos se dediquen a promocionar nuestra colección entre su círculo de amistades; por lo general quienes leen Maricones del espacio disfrutan de la colección como un placer individual y privado, como si fuera el porno de gordas, jajaja.
Como este post va de mamoneo y de ventas, os dejo aquí la conclusión a la que he llegado. Lo único que hemos visto que funciona es esto: Nuestros libros se venden en Freaks y los vende Lucía en los festivales de autoedición porque quien los ve en físico los coge, les echa un vistazo rápido y, cuando se da cuenta de que el precio es asequible y más o menos les pueden interesar, entonces es cuando los compran.
Así pues, nada. Con el tiempo y una caña.
-R-
Es lo que tiene el aburrimiento, para qué nos vamos a engañar. El sábado pasado visitamos un centro comercial y, como mi socio necesitaba pasarse por el FNAC, se le ocurrió que podríamos dejar allí un MARICONES MANIA para ver qué es lo que sucedía. Total, que justo después de dejarlo en uno de los estantes más concurridos (junto al libro de ElRubius y uno del Fortnite o como coño se llame) ya había un par de tíos que lo pillaron para ojearlo al grito de "¿Pero esto qué eees?". La verdad, apenas habían transcurrido unos pocos segundos desde que lo colocamos en los estantes y, claro, ante tan repentina reacción de un cliente estándar no pudimos sino sentirnos más que satisfechos con nuestro trabajo. No sé si habréis ido a un FNAC de esos últimamente, pero es que el nivel de agresión visual es desorbitado, quiero decir, la mayoría de los productos que tienen están hechos para llamar muchísimo la atención e inflamarte las retinas. Total, que terminas agotado de tantos colorines, fluorescencias y brillos. No sabes ni adonde mirar para no acabar cansado de tantos estímulos visuales... por eso valoramos todavía más el hecho de que el chaval aquel se fijase en el maricones, pasando por alto el resto de la morralla que tenía a su lado. 
